Así se llamaban los loritos que tuve cuando era pequeña. El nombre se lo puso mi madre, caraqueña, y no podía ser más tropical. Se volvían locos cantando sin parar cuando mi padre trajo de Puerto Rico el disco de Juan Luis Guerra y 4:40. Su canción favorita Ójala que llueva café, que poníamos los domingos.
Me recuerdan a mi infancia.
Quiero ser "maruja", y pasarme el día cosiendo, haciendo punto, ganchillo, manualidades, cocinitas y otras "marujadas", pero sólo las hago de vez en cuando, cuando puedo, cuando tengo tiempo; casi todas para mi hija Greta, de cuatro años, que también quiere coser y hacer punto cuando me ve.
Parchita y cotoperí
martes, 8 de junio de 2010
Bienvenido Esteban
Por fin nació Esteban. Un acontecimiento sin duda en Tremedal.
Le tejí estos tres pares de patucos: los verdes de algodón egipcio antialérgico para bebé, los marrones clarito de lana merina y los blancos de fibra de maíz. 100% naturales, para un niño que crecerá entre vacas, cantueso y retama en flor en la sierra de Tremedal.
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